• Juan Cabrera Cabrera, jugar al golf mejora la calidad de vida de los aficionados y aumenta sus expectativas de vida

    Entrevistas
    21 de Agosto de 2018
    Juan Cabrera Cabrera, jugar al golf mejora la calidad de vida de los aficionados y aumenta sus expectativas de vida

    Juan Cabrera Cabrera

     

    JUAN CABRERA CABRERA

    Doctor en Medicina y Profesor de la Facultad de Ciencias de la Salud

    Jugar al golf mejora la calidad de vida de los aficionados y aumenta sus expectativas de vida

     

    En 1973, Juan Cabrera inició la formación de postgrado como médico residente en la Fundación Jiménez Díaz, trabajando en la Unidad de Enfermedades del Hígado del Hospital Clínico de Barcelona durante 6 años, donde comenzó su faceta de investigador clínico, producido y publicando investigaciones en revistas internacional de máxima difusión.  En Canarias ejerció como Gastroenterólogo en el Hospital Universitario de Canarias, pasando por el Hospital Ntra. Sra. del Pino y finalmente por el Dr. Negrín, siendo becado, durante un año, por el Ministerio de Sanidad, como “Fellow Reseach” del Northwestwern Memorial Hospital de Chicago. Es profesor de Medicina en la Facultad de Ciencias de la Salud, de la cual ha sido decano durante 10 años.    

     

    ¿Como y cuando se inició su relación con el mundo del golf? 

    La verdad es que he sido un jugador poco constante, todavía tengo handicap 28, pues cuando trabajaba en Barcelona y frecuentaba el antiguo RCG El Prat, pero era precisamente, para jugar al golf, sino porque durante los veranos disfrutaba con mi familia de un magnífico Club con su piscina, restaurante, pues entonces mi vida profesional ocupaba absolutamente mi tiempo. Comencé a finales de los años 80 a jugar en el RCG de Tenerife, aunque, he de reconocer que lo visitaba con más frecuencia por su magnífico restaurante que para jugar.  De regreso a Las Palmas en el 87, retomo el golf gracias a compartirlo con varios amigos, entre ellos, Edmundo Rodríguez y José La Roche. En esa época, La Roche era presidente de la Federación Canaria de Golf, totalmente identificado con el deporte y con todo su empeño en conseguir su máximo calado entre los niños y jóvenes de aquella época. Canarias, se convirtió en un referente en España, tuvo de nuevo representantes en competiciones nacionales e internacionales con brillantísimos resultados tanto en nuestro país como en el mundo, además de miembros del equipo español y del del continente. Igualmente, los profesionales canarios, de todos conocidos, han destacado a gran altura en las pruebas de máxima categoría. 

    ¿Qué le ha aportado el golf a lo largo de estos años?

    Han sido pocas las posibilidades de disponer de tiempo para el golf, sin embargo, nunca llegue a “colgar” los palos, recuerdo algunos veranos que pasamos en Maspalomas con la familia La Roche, mis hijas mayores aprendieron a jugar en esa época y aunque no han mantenido continuidad han adquirido los conocimientos y habilidades necesarias para retomar en cualquier momento.  Personalmente el golf me ha aportado habilidad creciente para sincronizar -“mi proyecto cerebral”- los diferentes golpes con su ejecución muscular en el campo. Esta sincronización es muy difícil de alcanzar si te inicias después de los 30 años y además no tienes mucho tiempo para entrenar.  Sin duda, he mejorado en el control de mi binomio “mente-fuerza”, como me decía mi también añorado amigo Luis Zaragoza: ¿ ya has contralado la fiera que llevas dentro? pues querido Luis,  lo sigo intentando. 

    ¿Cuáles son los grandes beneficios del golf en la salud? 

    En general, siempre se habla de los efectos favorables de este deporte sobre la salud, pero quizás por deformación profesional solo doy crédito a lo que está comprobado con metodología científica como un estudio de la Universidad de Edimburgo en el que contrasta datos fehacientes en 5.000 investigaciones. En un estudio presentado por especialistas en medicina deportiva del Rose Medical Center de Denver (EEUU), concluye que al hacer un recorrido de 9 hoyos andando se queman alrededor de 1000 calorías, mientras que si se hace en buggie solo serían 411. Esto tiene consecuencias en el pronóstico de supervivencia de acuerdo con la investigación del Instituto de Karolinska (Suecia), que demuestra que la tasa de mortalidad para los golfistas es 40% menor que la de otras personas no practicantes de golf, de su mismo sexo, edad y nivel socioeconómico, lo que se traduce en un aumento en la expectativa de vida de cinco años en el grupo de jugadores asiduos al golf. Estos beneficios están directamente relacionados con un descenso del peso, de la presión arterial, un mejor control de los niveles de azúcar y un mejor equilibrio entre las fracciones “buenas” y “malas” del colesterol.  El golf es recomendado por psicólogos ya que permite reducir el estrés y mejora la calidad de vida, respirar en un ambiente no polucionado, disfrutar de espacios verdes, es en definitiva el “interruptor” que desconecta durante un buen rato del trabajo, de los problemas, preocupaciones... con lo que además mejora nuestro sueño.
     


     

    ¿En el mundo de golf apellidarse Cabrera?

    Siempre presumo y así lo ha comentado Rafa en distintas entrevistas, que fui la primera persona en ponerle un palo de golf en las manos, con solo 5 o 6 años.  A finales de los 80, persuadí a mi primo Rafael Cabrera (padre), que vive junto al campo de golf de Maspalomas, de empezar a practicar el golf. El niño Rafa nos acompañaba y no perdía ojo de lo que sucedía durante los 18 hoyos, hasta tal punto que le comenté a mi primo “este niño tiene un interés y capacidad de atención fuera de lo normal y va a servir para este deporte”.

    Rafa tiene capacidad de sacrificio, es disciplinado, humilde, con afán de superación, estas cualidades y muchas horas de entrenamiento, han hecho de él un gran campeón. Todos estos dones le son propios, siendo también su familia, un valor estrella de su éxito. Emma y Rafael (padres) les han sabido inculcar estos valores, han trabajado día a día al máximo de sus posibilidades, para facilitarles el camino del éxito, el cual ha llegado como una  justa recompensa a tanto desvelo. La familia Cabrera Bello es una “piña” fuerte, comparten el amor por este deporte, el amor por la familia, son solidarios con los deseos y objetivos vitales de cada miembro de su unidad familiar. Lo único que lamento, es no haber podido vivir más de cerca su pugna para alcanzar  la gloria que hoy disfruta.  En los últimos, años gracias a Canal Golf puedo compartir,  junto a mi hijo  pequeño, que es su primer seguidor,  la emoción y la admiración  por su magnífico golf.  

    ¿Cómo está viviendo esta nueva etapa en su golf? 

    Desde hace dos años, estoy intentando regalarme más horas del día, a mí y a mi familia, estando dispuesto a mejorar mi golf y esto solo lo puedo conseguir con más horas práctica.  Mi mujer, que ha sido campeona de artes marciales, me acompaña en esta andadura, progresando en muy poco tiempo, convirtiéndose ya en una difícil rival. Tenemos un hijo de 7 años, que practica desde hace 3, con una afición desmedida compartida con el futbol.  Jugaría si pudiese todos los días, conoce los nombres de la mayoría de los jugadores de los Circuitos europeos y americanos, concediéndole el honor con motivo de su boda el pasado diciembre, Rafa Cabrera y Sofía su entonces prometida, el ser el portador de las arras. Charló con Jon Rham y con Martin Kaimer, invitados a la boda, de tú a tu, sobres sus swings, sus formas de pegarle a la bola y de cómo puttean como si de algo normal se tratara. Este deporte le enseñará respeto a los demás, tesón, honradez, templanza y humildad.

    ¿Qué cambios introduciría usted en el golf?

    El progresivo incremento de licencias de golf en nuestro país se detuvo en 2009, perdiéndose casi 30.000 en los últimos 9 años de las que 2.000 han sido Canarias. Debemos promocionar el golf en nuestro archipiélago, no solo como deporte, sino como herramienta para estimular el crecimiento turístico, nuestra primera industria y conseguir incrementar el capítulo servicios, actividad de la que viven la mayoría de los canarios.  

    Como comentaba antes, el golf es un deporte que aporta salud con evidencias contrastadas científicamente, por lo que muchos países estimulan la práctica de este deporte.  La ventaja del golf es que se juega a todas las edades con rendimiento creciente en lo que a salud se refiere. Para conseguir una mayor difusión del golf necesitamos planes de divulgación para que los jóvenes conozcan este deporte, siendo en ellos el aprendizaje más sencillo y las habilidades adquiridas durarán para toda la vida, permitiéndoles retomar años más tarde, aunque lo hayan abandonado durante un tiempo.   

    Otro de los problemas, a mi juicio, es la falta de tiempo que tienen la mayoría de las personas a la edad de máxima producción laboral, por lo que habría que promocionar un golf “corto”, que puede consistir en competiciones de 9 hoyos, no solo para los benjamines y favorecer la construcción de más campos de Pitch & Putt. Nada de esto puede conseguirse sin la presencia del golf en los medios de comunicación, prensa escrita, Tv y redes sociales.      

    MARÍA CASTILLO

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